REPOLLO CON PIMENTÓN Y HUEVO A LA PLANCHA

La mejor receta de repollo con pimentón y huevo a la plancha
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Esta combinación explosiva de repollo con pimentón y huevo a la plancha surgió en casa por casualidad. Primero llegó la receta más sencilla, con tan sólo cuatro ingredientes, que es repollo con pimentón y ajos. De aquí han surgido otras combinaciones como esta receta de repollo con pimentón y huevo. Que añadiendo solo un ingrediente más, te lucirás en la mesa y conquistarás hasta a los más pequeños de la casa.

¿Qué te aporta esta receta de repollo con pimentón y huevo?

Repollo, col repollo, col cerrada o simplemente col, pertenece a la familia de las crucíferas como el brócoli, coles de bruselas y coliflor. Su nombre se debe a la forma en la que están sus hojas comprimidas y entrelazadas formando una bola compacta y firme.

Aprovecha que el repollo se rehoga con pimentón para evitar poner sal. Si te gustan mis recetas, te habrás dado cuenta que pocas veces pongo sal. Y esta receta es ideal para aprender a re-educar el paladar y reducir su consumo.

El repollo es buena fuente de vitamina C y ácido fólico. Posee componentes de acción anti-viral, antioxidante, depurativa y es preventiva en algunos tipos de cáncer, como el de mama. Rica en fibra por lo que ayuda a regular el tránsito intestinal y evita el estreñimiento.

Si hace tiempo que no comes esta verdura tan rica, estoy segura que con esta receta vas a redescubrir al repollo y animarte a incorporarlo en tu dieta.

Los más pequeños pedirán que la repitas. ¡Me cuentas!

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REPOLLO CON PIMENTÓN Y HUEVO A LA PLANCHA

Dificultad: Principiante Tiempo de preparación 10 mins Tiempo de cocción 30 mins Tiempo total 40 mins
Raciones: 5
Mejor temporada: Adecuado durante todo el año

Descripción

Esta receta no pasará indiferente por vuestra casa

Qué necesitas para hacer repollo con pimentón y huevo a la plancha

Cómo hacer repollo con pimentón y huevo a la plancha

  1. Reúne los ingredientes.

    Los tendrás enseguida: repollo, patata, huevo, ajo y pimentón dulce. El repollo en plena temporada y el resto, muy de fondo de despensa. Cuéntame si hay alguno que no sueles tener.

  2. Comienza hirviendo el repollo con la patata.

    Mientras lavas y troceas el repollo y la patata, pon una cazuela con agua a hervir. Cuando hierva, pon la verdura y cocina durante 20 minutos o hasta que todo esté tierno. Escurre y reserva.

  3. Calienta las dos cucharadas de aceite de oliva en una sartén grande.

    Añade los ajos en rodajas finas y cuando empiecen a estar dorados, aparta la sartén del fuego, añade el pimentón y rehoga un minuto con el calor residual.

  4. Pon la sartén de nuevo pero a fuego medio.

    Ves incorporando el repollo cocido. Hazlo en dos o tres veces para que puedas mezclar todo bien. Con ayuda de una cuchara de madera puedes ir partiéndolo y removiendo a la vez. Fíjate en la foto lo bien queda el repollo rehogado.

  5. Pruébalo por si quieres añadir más pimentón dulce.

    O un poquito de sal para los que os cuesta quitarla del todo.

  6. Finalmente, haz el huevo a la plancha.

    Si te acuerdas, saca el huevo de la nevera un rato antes. Te asegurarás una mejor cocción. Calienta una gota de aceite en una sartén anti-adherente. Cuando esté caliente, echa el huevo y baja a fuego medio-bajo.

  7. Para ayudar en la cocción del huevo a la plancha,

    tapa la sartén un par de minutos o hasta que el huevo esté cuajado a tu gusto.

  8. Una vez emplatado, espolvorea un poco de pimentón dulce y/o escamas de sal.

    Espero que os guste. ¿Ves que fácil?

Información Nutricional

Porciones 5


Cantidad por porción
Calorías 250kcal
% Valor diario *
Grasa total 12.9g20%
Grasa saturada 2.1g11%
Colesterol 231mg77%
Sodio 168mg8%
Potasio 1160mg34%
Carbohidratos totales 14.1g5%
Fibra dietética 11g44%
Proteína 19g38%

Vitamina A 14.6 IU
Calcio 4.1 mg

* Los valores porcentuales diarios se basan en una dieta de 2,000 calorías. Su valor diario puede ser mayor o menor según sus necesidades calóricas.

Notas

  • No pongas sal. Aprovecha que lleva pimentón para no poner sal e ir acostumbrando y reeducando al paladar a reducir su consumo. No hace falta esperar a tener hipertensión o tener otro problema de salud, para eliminar la sal de tu dieta. Aprende a disfrutar del sabor natural de los alimentos.
  • Guarda el agua de la cocción, puede que te venga bien en otra elaboración como para un arroz, guiso, sopa o simplemente quieras beberlo como un consomé. También se puede congelar una vez frío.
  • Siéntete libre de añadir otras especias o ingredientes. Puedes darle tu toque “especial” con un poco de cebolla, puerro, unas setas, jamón, beicón, chorizo, huevo frito en vez de a la plancha... hazlo a tu gusto.

Déjame un comentario si la has hecho y qué te ha parecido la receta, si tienes alguna sugerencia o si te ha surgido alguna duda sobre la preparación

Ana Tu Nutricionista

Dietista-Nutricionista

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