Calabacín: Disfruta de sus beneficios y recetas

El calabacín o zucchini es una de las hortalizas que he escogido hoy para transmitirte lo importante de su consumo de uno forma clara y sencilla . Espero que descubras conmigo esos beneficios tan interesantes que tiene el calabacín para que se convierta en un imprescindible en tu cesta de la compra.

El calabacín (curcubita pepo, nombre científico) es una hortaliza que pertenece a la familia de las cucurbitáceas, de las que hay unas 900 especies de plantas. Otras frutas y hortalizas como la sandia, melón, calabaza o pepino pertenecen a la misma familia. La mejor temporada para disfrutar del calabacín son los meses de verano (de junio hasta septiembre), aunque podemos encontrarlo todo el año ya que se adapta muy bien al cultivo en invernadero. Como adelanto, decirte que estás ante una hortaliza de las más nutritivas:

Versátil en la cocina. Puedes usarlo en numerosos platos: cocinados, hervidos, a la plancha, al vapor, al horno, en papillote, añadirlo en guisos o incluso puedes comerlos en crudo en una original ensalada o en carppaccio o en palitos para comer hummus. Puedes cortarlos como si fuesen tallarines y añadir cualquier salsa cómo a la pasta, rellenos de carne o pescado o legumbres, como base para una mini-pizza, en cremas frías o calientes como la que te propuse hace unos días de crema de calabacín y melón con sal de jamón, en tempura e incluso puede ser un ingrediente para hacer un rico bizcocho. Seguro que ya lo estás empezando a mirar de otra manera después de leer este párrafo.

Un gran aliado en dietas para perder peso. Su contendido en calorías es poco, 17kcal por cada 100 gramos de calabacín porque tiene un alto contenido en agua (alrededor del 95% de su composición). Esto, junto con su contenido en fibra que ayuda a incrementar el nivel de saciedad y mejorar el estreñimiento, lo hacen un alimento ideal para adelgazar.

Su tipo de fibra lo hace único. Contiene mucílagos, un tipo de fibra soluble que suaviza y desinflama las mucosas del estómago, favoreciendo las digestiones y evitando problemas como el estreñimiento. El calabacín tiene esa acción suavizante sobre el aparato digestivo por lo que se aconseja en malas digestiones, gastritis, colon irritable, colitis…

Tu vista te lo agradecerá. Al ser rico en luteína y zeaxantina (carotenos) tiene efectos beneficiosos para la vista. Interesante el consumo de calabacín para la prevención de cataratas y la degeneración macular asociada al envejecimiento.

Ideal para deportistas. Bien tengas una actividad física leve, moderada o intensa, el calabacín te aportará magnesio y potasio, que ayudan a regenerar mejor el músculo.

Recomendable para personas que sufren retención de líquidos. Gracias a su alto contenido en potasio y su bajo contenido en sodio lo hacen especialmente diurético. Por lo que también es un alimento ideal para personas que sufren de hipertensión, hiperuricemia o gota. Eso sí, olvídate de añadir sal al cocinarlo !! si no, estás añadiendo ese aporte de sodio que carece y desaparece este efecto diurético.

El calabacín destaca por su alto contenido en agua, su importante fuente de fibra así como de vitaminas del grupo A, B y C. Destacar también su aporte en minerales como el calcio, potasio, magnesio o fósforo.